José Molina (1937-2011), gerente durante años de la editorial se definía así en Economistas a pie de calle:
Soy doctor en economía, sociólogo, auditor y, ante todo, un incansable luchador por la economía participativa y la democracia real, la transparencia y el buen gobierno.
Nací en Murcia en el año 1937, (zona republicana) viví mi infancia en ese ambiente de miedos que dominaba la sociedad, cursé el bachillerato en el Colegio de Maristas y he vivido observante y participando en el progreso social, entendiéndolo como un movimiento que agita cada día y que une reivindicación, acción e investigación.
He vivido la política “desde dentro” pasado épocas duras, como muchos. Y todas estas vivencias, tanto personales como profesionales, me han hecho madurar en todos los sentidos. Por eso, ahora que la tecnología me brinda esta oportunidad, quiero compartir con vosotros mis opiniones, mis inquietudes y mis esperanzas de esta sociedad para encontrar vías que solucionen sus problemas.
Desde mi juventud llevo trabajando en la divulgación de ideas de cambio. Inicié mis actividades en movimientos sociales en los difíciles tiempos del Plan de Estabilización de los años 1959/1960. Los criterios aplicados por el ministro López Rodó fueron muy duros para la economía, así como para la vida social, viví la fuerte emigración, y unido a la sistemática represión política. Emigré a Madrid donde simultaneé trabajo y estudios de Economía y Sociología, y donde participé, en el año 1963, en la creación de la Editorial ZYX, que fue un movimiento social de promoción de militantes que dieron vida a muchas experiencias de participación sindical, social, ciudadana y política, en esa lucha social por la igualdad. que tanta fuerza desarrolló en la ideología política. Desde la gerencia de dicha organización tuve el privilegio de participar en esa plataforma que constituyó un movimiento de cambio cultural, divulgando un pensamiento crítico, experiencias de participación directa en la gestión social y de los medios de producción, así como un apoyo directo a los movimientos sindicales y políticos de aquellos años.
En la década de los setenta, continué mi vida profesional como auditor de cuentas y de profesor de Sistema Fiscal en la Universidad de Murcia. Cómo Vicepresidente del Instituto de Censores Jurados de Cuentas de España (1979/1985) impulsé la auditoría, su aplicación como arbitraje en el Estatuto de los Trabajadores, y en el control del gasto público. El compromiso con la política me llevó a participar en el primer gobierno de la Comunidad Autónoma de Murcia, como Consejero de Economía Hacienda y Empleo. Terminado mi mandato, regresé a la vida profesional donde el contacto permanente con las estructuras empresariales, las evoluciones de las mismas, sus crisis, unas de gestión y otras cíclicas, me dieron la posibilidad de planificar y acometer muchos planes de viabilidad para salvar empleos y proyectos empresariales. Estas actividades en la economía privada, en la pública y en la Universidad, me han aportado experiencias muy valiosas, y he recibido de muchos profesionales con los que he colaborado, su visión realista como empresarios, sindicalistas, organizaciones y universitarios, compartiendo ilusión y trabajos, mejorando intentando mejorar la gestión y la eficiencia en aquellos proyectos en los que participaba.
En este batallar tengo que agradecer a muchos sus colaboraciones y apoyos, sería un listado interminable, por lo que es mejor dejarlo extensivo para todos los que han estado a mi lado. Gracias.
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